domingo, 24 de abril de 2016

Y si...?

6 comentarios:

  1. Me ha encantado el vídeo. Y el que sale luego también es genial.

    En el libro "la única dieta" (lo puse en pdf en una de mis entradas y ahí sigue) todo el tiempo hablan de esto, de ser consciente, de perdonarnos, de no hablar de nosotras mismas con ese deje de menosprecio con el que a veces nos tratamos. Una persona feliz no se da atracones.

    Me ha gustado mucho, gracias por ponerlo. Me recuerda cuando mi hija quería perder piso y me decía "quiero comer esto o aquello" y yo le preguntaba "¿es hambre o gula?" y muchas veces se le pasaban las ganas (y otras no). Tenemos mucho que aprender...

    Besotes, guapisísisima :-)))

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    1. El que sale justo después también. Pero me he fijado que lo promociona "Especial K", ya te vale!! precisamente ellos, con sus azúcares-lobo disfrazados de piel de cordero.

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    2. Ya, es verdad. Pero ni siquiera me di cuenta, ja ja ja. Supongo que me habrá quedado en el subconsciente, pero estos del Special K no saben que yo paso tres pueblos de gastar en cosas que no he decidido yo, je je je.

      Si miras el lateral de la caja de Special K y el de Corn Flakes "normal", verás que tienen las mismas calorías. Qué morro tienen, ozú.

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  2. Ufff, da para pensar un buen rato...
    Lo malo es que una de mis teorías es cierta, casi todo el mundo que hace dieta y pierde muchos kg, vuelve a recuperar gran parte de ellos, e incluso gana más. Porque es totalmente cierto que tenemos mentalidad de gorda o de persona a dieta. Yo no como lo mismo, ni de la misma manera que hace diez años, ojalá no hubiera cambiado mis costumbres. Pero aquí estoy, estresada, agobiada y sin tiempo para casi nada. ¿Y qué hago? comer. Antes escuchaba música cuando estaba hasta arriba de faena, ahora como galletitas o pan. Hace tiempo que intento volver a mis antiguas costumbres y me cuesta muchísimo. Antes, en la vida hubiese comido leche con galletas María después de cenar, me parecía imposible, no me apetecía en absoluto, ahora, si me descuido me como la docena.

    Intentaremos practicar la consciencia. Eso y comer más despacio, como hace diez o quince años.

    Por suerte, tengo tres buenos hábitos de los cuatro que mencionaban, menos mal, jeje.

    Besos y muchas gracias por compartir el vídeo.

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    1. Doy fe! Cada vez que pienso que en un tiempo lejano pesaba 56 kg...si me descuido, doblo!. Y eso teniendo una alimentación tan sana como la que tengo habitualmente. Lo de comer despacio sí que es mi asignatura pendiente...

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    2. Yo también estoy de acuerdo.
      Con los años no es que pesemos más, es que el cerebro se ha puesto a recalibrar y tira por lo alto (el muy cínico, ja ja ja).

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